El Tiempo y el Ritmo
Para que usted pueda interpretar la partitura musical de más abajo y relacionarla con las tareas laborales, comerciales, empresariales de todos los días, me permití marcar algunas señales básicas para alcanzar la armonía musical que en las orquestas las practicamos: el TIEMPO y el RITMO.
TIEMPO y RITMO son dos elementos fundamentales para tener en cuenta en todos los equipos de trabajo. Sería imposible para los músicos poder interpretar una melodía si entre todos no estaríamos de acuerdo en respetar la velocidad del tema y el ritmo que le vamos a imponer (en este caso es de 3 tiempos por compás).
En nuestras compañías debemos realizar exactamente lo mismo: ponernos de acuerdo en respetar los TIEMPOS en que juntos vamos a desarrollar determinada tarea (sería como tocar la partitura) y el RITMO para que el público (clientes) pueda cantar o bailar al son de nuestro arte. Si pretendemos que ellos reaccionen, actúen, se muevan, realicen algo (compren, vendan, promocionen, utilicen), no podemos andar con RITMOS cruzados.
Esta partitura es cantada en cada cumpleaños, allí todos desafinamos, no pensamos ni en el tiempo ni en el ritmo, es un cumpleaños, algo informal y está todo permitido. pero cuando hay empresas que desafinan por desconocer la importancia de los tiempos y el ritmo, o porque sus funcionarios hasta pueden creer estar tocando adecuadamente y sus oídos no fueron entrenados a escuchar a sus pares ni interpretar adecuadamente la partitura, lo que sigue es el caos, la pérdida del mercado, el placer de trabajar. Aún puede ser que la misma partitura tenga la necesidad de ser corregida, no importa lo que tengamos que corregir o mejorar, lo importante es triunfar.
Las tareas de todas las orquestas son las de generar una secuencia de sonidos muy gratos a los oídos de nuestra audiencia, porque público y clientes, clientes y público siempre serán los que corroboran con sus aplausos, sus compras, su dinero, el interés por nuestros productos o servicios y ello depende de nuestro accionar. A ellos debemos cautivar, ése es el secreto de toda formación orquestal y de toda organización empresarial.
Elias Bajer
